Pie cavo

El pie cavo es una afección en la que el arco del pie está particularmente alto o «cavo». El pie cavo es una afección poco común que afecta a personas de todas las edades. Puede que uno o ambos pies estén afectados.
Debido a que el arco está tan alto, el peso corporal se distribuye de forma anómala por el pie. Es decir, no se distribuye de forma equilibrada por todo el pie. Al caminar y estar de pie, la mayor parte del peso se coloca en la bola del pie y en el talón. El desequilibrio en los pies causa una serie de síntomas diferentes.

¿Cómo se desarrolla el pie cavo?

Puede ser difícil determinar la causa precisa del pie cavo. Sin embargo, el pie cavo suele ser un síntoma de un trastorno neurológico. Si el pie cavo se ha producido debido a un trastorno neurológico o una afección similar, el pie cavo empeorará gradualmente mientras se desarrolla el trastorno. Si el pie cavo no se debe a un trastorno neurológico o una afección similar, el pie cavo se mantiene en el mismo estado, es decir, no empeora con el tiempo. En otros casos, el pie cavo se produce debido a una anomalía genética de la estructura del pie. Los niños que caminan sobre los dedos del pie pueden desarrollar un pie cavo con el tiempo.

El pie cavo también puede ser consecuencia de:

• Parálisis cerebral
• Pie equinovaro (talipes equinovarus)
• Hernia discal
• Enfermedad de Charchot-Marie-Tooth (CMT)
• Espina bífida
• Polio
• Distrofia muscular
• Apoplejía – accidente cerebrovascular

¿Cuáles son los síntomas de un pie cavo?

Al estar de pie, el arco del pie está muy elevado. Este es el síntoma más claro. El dolor y la inestabilidad también pueden ser un indicador de que se tiene esta afección.

Otros síntomas incluyen que el hueso del talón esté en un ángulo muy agudo y que la sección media del pie soporte poco o ningún peso. A menudo, el talón rotará hacia dentro y el antepié caerá hacia dentro. Esto se conoce como pronación. Los dedos de los pies encorvados y una sensación de rigidez en el tendón de Aquiles también pueden indicar el hecho de padecer un pie cavo.

Si tienes un pie cavo, también puedes experimentar que se desarrollan otras secuencias, como:

• Irritación e inflamación del ligamento del arco
• Inflamación de la espinilla
• Dolor bajo el talón
• Problemas con el tendón de Aquiles
• Inflamación del ligamento bajo el pie (fascitis plantar)
• Espolón calcáneo

Si tienes un pie cavo, se produce una tensión excesiva en la capa de grasa del talón y los tendones, músculos y ligamentos del arco del pie. En un pie cavo la mayor parte de la tensión recae en el talón y el antepié, por lo que el dolor en el talón y el antepié también es un indicador importante para saber si se padece pie cavo.
Comparándolo con un pie sano bien alineado, el hueso y la capa de grasa bajo el talón en un pie cavo están expuestos con frecuencia a una tensión excesiva.

Si tienes un pie cavo, el antepié también está expuesto a una presión excesiva. Una de las consecuencias del pie cavo es que el tendón de Aquiles se tensa. Para aliviar la presión en el tendón, se redistribuye el peso corporal de forma inconsciente, lo que incrementa el peso en el antepié y frecuentemente en el dedo gordo.
Para ver qué parte del pie soporta más peso, comprueba dónde hay piel dura. También puedes comprobar qué parte del zapato se ha desgastado antes. El desgaste también puede indicar qué parte del pie soporta mayor peso.

Para mejorar las problemas causado por un pie cavo, es importante centrarse directamente en desgarcar la presión. Lleva buen calzado con amortiguación en el talón. Te recomendamos considerar llevar plantillas de apoyo.
Si tienes un pie cavo, en la mayoría de los casos encontrarás que hay un ligamento tenso bajo el pie, lo que normalmente es causa de inflamación.

¿Cuál es la forma de tratamiento del pie cavo?

Si tienes un pie cavo, es importante aliviar la presión del pie. Un pie cavo es un pie mal alineado. La mala alineación supone que el peso corporal se distribuya de forma no equilibrada. El peso corporal distribuido de forma no equilibrada presenta un riesgo incrementado de padecer dolor por todo el cuerpo.

• Evita caminar en suelos duros.
• Lleva buenos zapatos con amortiguación, preferiblemente con una plantilla.
• Consulta a tu médico, fisioterapeuta o especialista en el pie para que te recomiende ejercicios suaves que relajen el ligamento bajo el pie. Fortalecer los músculos pequeños colocados bajo el pie puede aliviar la presión en el ligamento bajo el pie.
• En casos poco comunes, la cirugía puede ser necesaria para eliminar la adhesión al hueso del ligamento bajo el pie.

Align Footwear® plantillas

Disponemos de testimonios positivos de clientes con pie cavo. Las plantillas Align Footwear® mejoran la movilidad, la comodidad y el rendimiento. Contribuyen a conseguir una mejor postura y una adaptación física a la cadena cinética y de esta manera te sentirás más sano y mejorarás tu bienestar. Cuando las plantillas consiguen que el cuerpo alcance una posición natural correcta, la presión de cada paso se distribuye de forma más equilibrada. Las plantillas Align Footwear® reducen las ondas de choque destructivas que atraviesan nuestro cuerpo cada vez que los pies tocan el suelo. De esta manera, se reduce la presión de las articulaciones, músculos, tendones y ligamentos.

Las plantillas Align Footwear® ajustan el pie para conseguir una posición más neutral. Las plantillas alivian la presión en el pie cavo y de esta manera contribuyen a reducir el dolor y aceleran el proceso curativo. Las plantillas Align Footwear® también contienen un gel suave que distribuye el peso corporal. Nuestras plantillas corrigen la posición del talón gracias a los puntos triplanares, de los que tenemos la patente internacional. Cuando el talón está alineado y en una posición recta, también se alinean las rodillas, caderas y hombros. Una buena alineación también elimina cualquier tensión innecesaria en los músculos, articulaciones, huesos y ligamentos, debido a que en un cuerpo alineado el peso corporal se equilibra de forma óptima.

Al contrario de los enfoques tradicionales, Align Footwear® no busca reforzar el pie con el uso de soportes para el arco, almohadillas de compresión y cuñas. Este tipo de almohadillas reducen la movilidad y debilitan los músculos del pie, lo que es doloroso a largo plazo y puede ser difícil de remediar con ejercicios. Los puntos triplanares de nuestras plantillas alinean el talón. Nuestras plantillas funcionan bien con los ejercicios para los pies que los especialistas recomiendan. Si fuerzas el pie a una posición específica como ocurre al llevar cuñas, almohadillas de compresión o soportes para el arco, se minimiza al efecto de estos ejercicios para los pies.

Las plantillas Align Footwear® son únicas. No existe un producto semejante en el mercado. Es importante ajustar la posición del tobillo para poder optimizar las condiciones físicas y permitir a los músculos del pie moverse de la forma que deben. Contamos con opiniones de clientes acostumbrados a estar de pie o caminar más de 10 horas al día.

Prueba nuestras plantillas Align Footwear® en tus pies. Puedes probar las plantillas durante 60 días. Si no estás satisfecho con el efecto conseguido, devuélvenos las plantillas y te reembolsaremos el dinero.